Y nuestra casa sigue oliendo
Y nuestra casa sigue oliendo
En las sábanas de mi cama
En las sábanas de mi cama
Me dan miedo las tormentas
Y ahora crujen los brazos
De aquellos árboles tan grandes
A los que prometimos subir
Con los crujidos de mi cuerpo
Me dan miedo las tormentas
Me dan miedo las tormentas